La era digital del audio comienza en Octubre de 1982 en Japón, en Marzo de 1983 en Europa y en Junio de 1983 en los Estados Unidos de Norteamerica.
El sistema de audio digital de discos compactos fue desarrollado por la empresa holandesa de electrónica de consumo PHILIPS Gloeilampen N.V. en cooperación con la empresa japonesa de electrónica de consumo SONY Corp. y se introdujo en el mercado japonés en 1982 y en todo el mundo en 1983. El sistema, que consistía en un dispositivo de audio ("reproductor de CD") y un soporte de sonido ("CD"), fue concebido como una alternativa de alta tecnología a la tecnología de grabación establecida y tenía tres ventajas comunes sobre esta: el almacenamiento de sonido digital mejoraba la calidad del sonido, el escaneo láser óptico sin contacto reducía el desgaste del soporte de sonido y sus dimensiones compactas lo hacían más fácil de manejar y creaban nuevas posibilidades de uso.
El reproductor de Sony CDP-101 |
Un par de copias de pre-producción del CDP-101, fueron entregadas a la prensa especializada mundial antes de la puesta en el mercado de los primeros ejemplares en su formato final. Estas copias fueron nombradas DAD-V7.
Modelo de preproducción DAD-V7 |
Entre 150 000 y 200 000 unidades CDP-101, se vendieron en todo el mundo entre octubre de 1982 y el final de 1983. Un par de cambios de aspecto se hicieron en el inicio de la comercialización en Japón : desde el número de serie 205000 (el número "2" está reservado para el mercado japonés), el indicador de presencia de disco "Disco" de la pantalla VFD es cambiado, y desde el número de serie 215000, el texto alrededor del receptor de infrarrojos se reduce. La versión que se vende en el resto del mundo a partir de marzo de 1983, no ha sufrido un cambio de estética.
Un acercamiento al frente del CDP-101. |
Aunque el Philips CD100 se desarrolló 40 años atrás, en general, la fiabilidad y el aspecto clásico (años 70) en el Philips CD100 le ha conferido el estatus de una estrella absoluta entre los primeros lectores de Disco Compactos.
Sin embargo, el Sony CDP-101 es un golpe maestro. Este reproductor es el tope de lar de la línea, con un peso de 7.6 kg tiene capacidades más allá de los de Philips, que sin duda se reflejan en la factura de compra (7 500 francos franceses para el Sony y 500 francos franceses para el Philips) cuando llegó al mercado. Por este precio, el Sony ofrecía dos nuevas tecnologías: control remoto por infrarrojos (sucesor de la transmisión por ultrasonido que se utilizaba en ese momento) y una pantalla de tubo fluorescente (VFD). También una amplia bandja motorizada con una muy fácil sujección del disco, teclas táctiles con recordatorio sonoro conmutable, dos velocidades de búsqueda rápidas, posibilidad de volver a la pista anterior, conector para auriculares con nivel de audio ajustable, sistema de auto- pausa, conversión digital/analógica de 16 bits, motor de disco de accionamiento directo, conector “Accessory” para uso escalable del reproductor, tomas RCA doradas, etc.
Página 1 de uno de los dos primeros folletos que promocionaban el CDP-101 de Sony en 1982 |